Béla Lugosi fue devorado por el vampiro de la droga. La fama, el alter ego, una sociedad refinada y elegante como la del Hollywood de los años treinta tenía que pasarle factura. Era algo así como vivir en el castillo de Drácula durante años y no ser mordido por el vampiro. Así fue el final: machacado por la estaca de las drogas, olvidado por parte de todos y convencido de que realmente era el conde Drácula y que era inmortal.
Béla Lugosi fue el nombre artístico del actor Béla Ferenc Dezső Blaskó (20 de octubre de 1882 - 16 de agosto de 1956). Nació en Lugoj, Transilvania, región del Reino de Hungría que estaba anexionado al Austro-Húngara (hoy Lugoj, Rumania), siendo el más pequeño de los cuatro hijos de un banquero.
Orígenes
Lugosi comenzó su carrera como actor en Europa, trabajando en distintas obras de Shakespeare. Sin embargo, se dio a conocer realmente con su papel de Conde Drácula en la adaptación cinematográfica de la clásica historia de vampiros de Bram Stoker llevada al cine por el director Tod Browning en 1931, el cual consiguió por su actuación en Broadway del mismo personaje.
Durante la Primera Guerra Mundial participó como teniente de infantería y tras la contienda formó parte activa en la izquierda de su país y fundó el sindicato de actores. En 1917 contrajo matrimonio con Ilona Szmik de quien se separaría en 1920.
Tuvo que exiliarse debido a su actividad política primero a Alemania en 1919 y posteriormente abandonó Europa y se marchó a los Estados Unidos. Allí recibió el papel de su vida, el del Conde Drácula, que interpretó primero en los teatros de Broadway y en diversas giras y que posteriormente llevó a la pantalla de la mano de Tod Browning en Drácula de 1931.
Pronto descubrió su vocación de intérprete y ya de joven comenzó a representar obras de Shakespeare en su país natal. Cuentan algunos que intentó también hacer carrera política por el sendero del comunismo. Tras luchar en la I Guerra Mundial, decide irse de Hungría y en 1921 aterriza en los Estados Unidos. Muy propio de los comunistas que desearon un mundo feliz para prójimo bajo la mirada de Lenin mientras, sin embargo, buscaban su propia felicidad en las tripas del capitalismo más desaforado y perverso. Todavía tiene más gracia que una vez situado en America, el actor de pensamiento comunista, se viera devorado por la vida de Hollywood hasta el punto de casarse con una millonaria –Beatrice Week- a la que no quiso nunca, pues fue afamado amante de otras mujeres. De pequeños papeles se alimentó Lugosi hasta llegar a la puerta de su casa el prestigioso director Tod Browning quien tenía el encargo de rodar una película sobre la vida del Conde Drácula. Y de ahí a la gloria del éxito. A pesar de que hubo críticos de cine que fueron demasiado duros con el bueno de Bela, el actor húngaro se hizo famoso no sólo en Hollywood, sino en el mundo entero con su papel de Drácula.
Fue el inventor del frac de fiesta, de la capa con forro color bermejo y de la gomina exagerada. Nadie le puede negar a Bela Lugosi que logró darle personaje de Drácula ciertos dotes de personalidad que todavía le dura. Su enfatizada interpretación del personaje –fue siempre actor de teatro y olvidó que en el cine existen los primeros planos- hizo por su parte que le criticaran definiéndolo como un actor que “los primeros cinco minutos daba risa para después dar pena el resto de la película”.
A partir de ahí, Béla Lugosi protagonizó toda una escalada derecha al estrellato con papeles siempre relacionados con el personaje de Stoker.
Pasó de ser el más sofisticado Drácula hasta llegar a la decrepitud más delirante. Comenzó a protagonizar películas de la serie B donde el personaje era ridiculizado, prestándose Lugosi a tal crueldad.
Después vino la parte en la que trabajó con Ed Wood, catalogado por casi todos como el peor director de la historia del cine. Con Wood protagonizó hasta tres películas.
Poco a poco fue perdiendo la cordura. Conforme la fama iba disolviéndose en el agua del olvido, su poder adquisitivo fue también perdiendo solidez. Para colmo de males, Béla Lugosi tenía problemas con las drogas. Cuenta algunos que acabó prácticamente arruinado, pidiendo dinero por las calles de Hollywood vestido de Drácula y asustando a las chicas cuando regresaban a casa después de salir de la oficina. Concedió entrevistas vestido de esta guisa y también cuentan que dormía cada noche con su frac renegrido en el interior de un ataúd. Se metió tanto en su papel que llegó a no discernir dónde estaba la realidad y dónde la ficción.
En el año 1956, y con 73 años de vida, Béla Lugosi dejaba el mundo mortal de los no vampiros.
Precisamente esto era lo que gritaba mientras se encontraba con la negra muerte. Que era un vampiro y que no estaba destinado a un final. La leyenda es muy perversa, y alguien alguna vez escribió que cuando expiró el último suspiro, desde la habitación del hospital donde estaba ingresado, salió por el pasillo un gran murciélago que cruzó el corredor buscando una ventana por donde escaparse y perderse en la infinidad del ocaso. Todavía nadie ha sabido dar explicación a tan extraño suceso.
Fuentes: Wikipedia
Cajón de apuntes
12 comentarios:
La de cosas que aprendo aquí.
Ha sido una lectura amena, y ahora conozco muchos sobre el.
Lastima lo de las drogas. Seguramente era más actor de teatro que de cine.
Abrazo
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(Ó_Ó)
q terrible suele ser la fama para algunas personas¡¡¡en lugosi tuvo nefastas consecuencias¡¡¡
Un besito¡¡¡¡
Siempre espero con ansias tus entradas... son exelentes!!! gracia spor comaprtir... fuerte abrazo!
Impresionante y merecido homenaje a un gran "monstruo" del cine.
Un abrazo
Siempre he oido hablar de él en mi casa pero nunca me habia parado a leer nada sobre su vida, me ha parecido muy interesante.
Besitos.
Joder, entrar aqui es profanar un panteon sagrado!!!
Hala, otro taco...no tengo remedio...en fin...genial, es genial el articulo y a mi bela es el dracula que mas me gusta, al margen de ser actor de teatro, de las criticas y del final como actor, Bela siempre me paracio un dracula sofisticado, el verdadero creador de esa imagen "señorial" y "terrorifica" a la vez, con el toque de sensualidad de su mordisco en el cuello.
Tal vez Dracula fué el ultimo romantico.
Besote compañera de noches.
Bela lugosi es uno de mis personajes favoritos de todos los tiempos, al igual que Rimbaud. Me alegro de encontrar un sitio con personalidades tan queridas por mi. Por cierto ¿conoces la canción de Bauhaus que habla de el?
Veo que tenemos gustos parecidos. Recordaba algo de la biografía de Lugosi, así que me ha encantado leer tu post.
Con tu permiso te seguiré.
Saludos
Excelente lo que publicas, un grande en serio.
Gracias por este rescate.
Saludos
Siempre es bueno recordar a quienes más se ha amado y admirado.
Lugosi ha tenido en su vida ese brillo negro, fúnebre y delirante.
Ser vampiro no es algo fácil, ni siquiera es sano para un humano.
Béla Lugosi tenía en su sangre la historia mítica. Su vida y luego su muerte, redundaron en ella.
Gracias por este memorandum tan maravilloso.
Gracias a ti Dama pálida por tus palabras, bienvenida a este tétrico lugar.
Soy valenciano 21años desde que era pequenyo mi madre me pinia la peli de dracula. que pirzierto peliquloooon bueno peazo actor que fue bela lugosi actor fenomenal lo malo era el rollo de las drogas etc. i como digo para mi el mejor libro i peliqula es dracula en blanco i negro no soi freak pero siepre e. dicho que nunca morire sin aver ido a transilbania a ver el castillo ademas de la tuba de bela lugosi grazias bela portodos mis momentos de la infanziaquemas dado
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